sábado, 7 de julio de 2012

Obrerete español.

Voy a atreverme a algo increíble, algo que nadie se atreve a hacer. Voy a criticar al que fomentó nuestra crisis con su pasividad, a una de sus causas indirectas: el obrero.

El obrero español traga con todo lo que le echen, pone el culo en pompa, cierra la boca y a aguantar. Contempla con pasividad como delincuentes de todos los estratos social se apropian de lo que no es suyo y cometen abusos sin descanso. Y de ésto fui testigo directo y víctima al mismo tiempo:
 En mi último trabajo todos nos preguntábamos si nuestro jefe había hecho algo legal en esta vida. No tengo ganas ni pantalla para enumerar todas las normas que rompía ese hombre, tanto jurídicas como empresariales como lógicas. Yo, el más pequeño (en edad) de la empresa, fui el único que hizo lo que tenía que hacer, poner una denuncia en el ministerio de trabajo solicitando una inspección. Por este motivo fui despedido ya que escucharon una conversación en la que yo comentaba a alguien de confianza lo que había hecho. TRES MESES después acudió una subinspectora ¿sabéis de que sirvió? de NADA, porque NINGUNO de los empleados (tampoco los de izquierdas) tuvo lo que había que tener para confirmar todo lo que yo había denunciado, ni de forma anónima.
Por otra parte quise denunciar, esta vez por lo penal, a mi jefe. En un principio DOS personas colaboraron conmigo, ya que como no estaba en la empresa no podía conseguir las pruebas que desde la policía se me exigían. Una vez las conseguimos ¿sabéis de que sirvió? de NADA, porque nadie quiso poner una denuncia aún habiendo salido ya de la empresa.
Hasta aquí mi experiencia directa personal.


Eso sí, el obrero se queja de todo, con o sin razón, pero siempre por la espalda y sólo palabras, nada de actos. El trabajador español se pasa años tragando injusticias sin poner ni una sola querella, y cuando todo está roto y en el límite como ahora entonces sale a la calle, acude a Sol a gritar, llama fascistas a los policías allí presentes y piensa que está cambiando el mundo, y vuelve a casa satisfecho. Y si me preguntan y hablo mal o digo que no acudo al 15m entonces soy  facha, egoísta, vago o no tengo conciencia social.

Los problemas terminan con soluciones, no con violencia en las calles, eso sólo sirve para dar imagen de delincuentes y que algunos piensen "normal que no tengan trabajo". Estamos pagando por lo que no hicimos en su momento, y eso que hablamos de algo gratuito y anónimo como es solicitar una inspección de trabajo.

Yo por mi parte, no pienso ir a ninguna manifestación de nada, estuve dispuesto a sacrificarme y al final lo que salió fue un suicidio.

2 comentarios:

  1. No te rindas! Sigue luchando por lo que tengas fe! La esperanza es lo último que se debe perder... De nada sirve como tu bien dices palabrear que aun gritando se hacen los sordos, los ciegos, y tapan nuestras bocas con mentiras!!!! Hay veces que una sola persona por si sola no puede hacer mucho, pero siempre hay gente como tú dispuesta a luchar.Siempre habrá gente consciente.

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    1. hola!muchas gracias por tu comentario. Sí siempre los hay pero son tan dificiles de encontrar...y lo malo es que esa gente, como son pocos, es raro que esten juntos, están mezclados con los que sólo se quejan, y pierden las ganas de hacer nada...

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